Pedanía situada en la unidad natural del Macizo de Navacerrada, con una población de 102 habitantes, aunque como ocurre con la mayoría de anejos y poblaciones de la zona, en verano el número de personas se multiplica con la llegada de las familias de emigrantes que vuelven a reencontrarse con su identidad o a participar en las fiestas.

La repercusión en la población del abandono de la actividad minera en la segunda mitad del siglo XX, con su máximo exponente en la mina ‘La Victoria’ y la progresiva decadencia de la trashumancia, desembocaron en una paulatina disminución de su población. Su economía actual se sustenta básicamente en la agricultura y la ganadería, siendo muy extensos los terrenos con olivos.

Un centenar de habitantes es la cifra habitual de vecinos que tienen, en la carretera provincial CR-4114 su principal vía de comunicación.

El ciclo anual de fiestas se abre con San Ildefonso y la Virgen de la Paz hacia la tercera semana de enero, disfrutándose gastronómicamente y con bailes.

San Isidro se celebra en mayo con una comida donde todo el pueblo participa en pleno campo.

A mediados de agosto se celebra la fiesta del emigrante, en honor a todos los emigrantes que salieron del pueblo para ganarse la vida y que vuelven a visitarlo por esas fechas. Se hacen juegos en la plaza, comida para todo el pueblo y baile.

Y finalmente, San Miguel se festeja cada 29 de septiembre, a base de suelta de vaquillas, pruebas de tiro al plato, degustaciones, baile o naipes, siendo ésta la principal fiesta de la pedanía.

En cuanto a los lugares de interés cabe reseñar en primer lugar la Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de la Paz, una construcción de la segunda mitad del pasado siglo, de una sola nave con añadido de la sacristía de planta rectangular en la cabecera. Se trata de una obra de mampostería realizada con granito.

También hay que citar el pilar, pilón o abrevadero de Nuestra Señora de la Paz y las antiguas escuelas por ser una edificación del siglo XX en una planta con una puerta de entrada en fachada y tres ventanas en un lado, así como vestíbulo y gran sala interior con hogar y chimenea.

Fuente: Centro de Desarrollo Rural del Valle de Alcudia y Sierra Madrona